Un fin de semana fuera y nuevas impresiones. Comimos bien y viajamos en el Molli hasta Kühlungsborn y Heiligendamm. En definitiva, un lugar precioso en la tierra perfecto para relajarse.
El Molli pasó justo delante de nuestro hotel.
Un fin de semana fuera y nuevas impresiones. Comimos bien y viajamos en el Molli hasta Kühlungsborn y Heiligendamm. En definitiva, un lugar precioso en la tierra perfecto para relajarse.
El Molli pasó justo delante de nuestro hotel.